Nos cuesta aceptar y nos da miedo a los seres humanos comprender nuestras diferencias, de ahí el éxito del comunismo y del socialismo, nos cuesta comprender que haya gente que piense distinto y quiera cosas distintas y que en general sea distinta, igual el engaño sigue ahí ya que vender la falsa ilusión de igualdad es lo que da más rédito político junto al victimismo.
Nunca olvidare la anécdota de un político que dijo “yo quiero lo mismo que tú” a lo que una amiga anarquista le respondió “entonces to gustara encamarte con dos negros con miembros viriles enormes como a mi”, y aún así siguen con el engaño, quieren que te identifiques con el lider, y el líder te dice, “yo soy uno más, yo soy uno de ustedes” y al final pienso “yo no soy como usted, no soy política, la gente de bien no se mete a candidato de un partido político, ahí va el sobrante, el que no sirve para nada en el mundo real, por eso tenemos las la “kakistocracia” que tenemos”, no nos gusta que hayan drogadictos, prostitutas, madres solteras, esclavos, pobres, ricos, musulmanes o evangelistas, pero un momento, y tú, mi amiga feminista, ¿Que vas a hacer al respecto? ¿Prohibir lo que no te gusta? A ti no te gusta el patriarcado que percibes, y qué pasa si a alguna mujer, un gay o una trans le gusta el patriarcado que percibe, ¿qué pasa si a una mina le gusta vestirse femenina y salir a triunfar en el mundo de los hombres? ¿Has pensado alguna vez que es lo que quieres cambiar? ¿Has imaginado alguna vez como hizo Tocqueville con la democracia, como sería en la práctica ese mundo igualitario que quieres imponer y que sería lo bueno y lo malo de lo que puede pasar en tu mundo utópico? No, quieres simplemente llegar allí a cualquier costo, lo negativo que pueda ocurrir en esa utopía con la que sueñas no entra en tu mente, no tienes capacidad deductiva ni entiendes de consecuencialismo, insistes con tu sueño de la tiranía de los iguales y esto está por encima de todo, incluso por encima de tu propia felicidad, no te importa que el mundo con el que sueñas lleve implícita una habitacion 101 o una cama de procusto, al contrario, estás dispuesta a torturar y a asesinar por tu utopía sin poder siquiera imaginar tu mundo utópico, si tanto odias el pasado, tus ancestros y tu mundo es que en realidad no quieres a nadie, y sigues dispuesta a pelear por un mundo del que ni siquiera eres capaz de imaginar y que si lo piensas verás lo nefasto que sería en la práctica, un mundo sin capitalismo, des jerarquizado y pobre, donde si te duele una mula debes sufrir y aguantar, donde tienes un 50% de posibilidades de morir al dar a luz, incluso grandes posibilidades de morir a la hora de abortar en ese aborto que tanto defiendes como derecho, para ti un derecho es la libertad de cometer todos los errores que te de la gana y que otro pague las consecuencias, claro, me olvido a veces que la mente humana llega muy lejos con sus obsesiones, el igualitarismo es una utopía que tuvieron soñadores del pasado que tenían una dignidad que a ti te falta, merece más respecto un socialista del pasado y te burlas de ellos porque en el fondo tu, como yo, eres creyente en Hobbes y no en Rousseau, no crees que el individuo libre elegirá siempre el buen camino, por eso sale de tu boca la ordinariez de “machete al macho”